¡Papá, ya sé cocinar!: Bacalao dorado

La receta de hoy es una receta portuguesa a base de bacalao (¡cómo no!), patatas y huevo. En Portugal lo he visto en las cartas de los restaurantes con dos nombres distintos, Bacalhau Dourado y Bacalhau a Bras. E igualmente lo he visto con múltiples variaciones; a veces le ponen perejil, otras veces cilantro, también lo he probado con aceitunas negras...así que podéis dejar volar la imaginación e ir probando.

Vamos a necesitar:

- un lomo de bacalao desalado

- una cebolla grande

- tres patatas

- cuatro huevos

- perejil y aceitunas negras (opcional)

Hoy vamos a hacer la receta elaborada pero luego os daré un truco para hacerla más sencilla pero igual de buena. Lo primero que debemos hacer es cortar las patatas y hacerlas "patatas paja", muy finitas para que al freírlas queden muy crujientes. Para cuando no estemos tan hacendosos, hay unas bolsas de patatas paja en el supermercado con las que se hace un bacalao dorado buenísimo y en muy poco tiempo. De hecho, una vez que tenemos las patatas en bolsa, el bacalao dorado es un plato ideal para cenar o picar algo cuando no tenemos tiempo para cocinar. Cortaremos las patatas con cuchillo o con mandolina, eso es cuestión de gustos. Si utilizamos la mandolina debemos pasar las patatas por el corte más fino.

Una vez hemos cortado las patatas, las pasaremos por agua para que suelten el almidón. Así no se nos pegarán al freírlas.

Para freír las patatas, pondremos abundante aceite de oliva en una sartén amplia. Tienen que quedar crujientes y doraditas. Cuando estén fritas, las sacaremos y las pondremos en papel absorbente para que no guarden tanto aceite.

Mientras las patatas reposan, cortaremos la cebolla y la pondremos a sofreir en una sartén amplia con aceite de oliva. Tardará unos diez minutos en estar en su punto, a fuego medio.

Mientras se pocha la cebolla, iremos desmigando el lomo de bacalao en trocitos pequeños. Hemos usado un trozo de bacalao desalado pero lo cierto es que queda igualmente rico si usamos bacalao congelado e incluso podremos usar una bandeja de bacalao desmigado. Pero os aseguro que el resultado será bueno en todos los casos. Y por supuesto, podéis usar bacalao salado y desalarlo en casa. A mi me parece un proceso demasiado latoso así que siempre lo compro desalado.

Cuando la cebolla esté lista, que quede doradita, le añadiremos el bacalao.

Dejaremos que se mezcle con la cebolla y que se cocine durante unos cuatro minutos, no más que quedará muy seco entonces. Mientras, iremos batiendo los tres huevos en un bol. Cuando el bacalao esté hecho, incorporaremos las patatas a la sartén.

Incorporamos los huevos batidos y mezclamos bien todos los ingredientes. No dejéis que el huevo se seque, que queda más rico jugoso. Se trata simplemente de mezclarlo todo y ya estará listo el plato.

Como veis, es un plato facilísimo.

Al servirlo, esparciremos perejil por encima, o cilantro, lo que más os guste, o nada, a vuestra elección. Si queréis ponerle aceitunas negras, este será también el momento.